El Ayuntamiento de Santurtzi culminará la reordenación del sistema de recogida de basuras y del servicio de limpieza con la aprobación de una ordenanza que garantice el cuidado de la vía pública. A partir de octubre, los ciudadanos se enfrentarán a sanciones que pueden alcanzar los 3.000 euros en los casos más graves como realizar pintadas o abandonar un coche en la calle.
«Las medidas adoptadas para mejorar la higiene y salubridad en la vía pública van a costar 600.000 euros anuales al Ayuntamiento y el ciudadano tiene derecho a percibir en las calles en qué se gasta su dinero», subrayó el alcalde, Ricardo Ituarte. En este proceso se han comprado 170 contenedores de superficie, que se suman a los 100 ya existentes y a los 60 que se mantendrán soterrados. Además, se han colocado 300 papeleras, se han adquirido dos nuevos camiones de recogida y se ha instaurado una brigada de tarde para retirar los residuos que se dejan fuera de los puntos limpios.
Según el mandatario local, una vez que se han puesto «todas» las herramientas para mantener limpio el municipio, ha llegado el momento de que los vecinos se responsabilicen y colaboren en esta tarea. Por eso la próxima semana se iniciará la aprobación de la nueva ordenanza de limpieza, que sustituye a la existente, «que data de 1995 y nos dejaba indefensos en muchos aspectos».
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